Una historia de crecimiento y compromiso

Un anhelo, un sueño: Fundación de nuestro colegio

“Mi Orden se siente solidaria con el deseo y anhelo expresado por los padres de familia de esta comunidad parroquial”, con estas palabras el P. Jesús Manzanares, Vicario Provincial de la Orden de Agustinos Recoletos fundamenta su solicitud al Ministerio de Educación para la creación del Jardín de Infancia que más tarde se convertiría en el Colegio Santa Rita de Casia.

Aún cuando la R.D. 01056, que oficializa su creación, tiene fecha del 05 de julio de 1972, ya el 3 de abril de ese año, el local de Simón Salguero abrió sus puertas a dos secciones de niños, una de jardín y otra de transición (hoy primer grado), bajo la dirección de la Sra. Cecilia Picone. El P. Antonio Martínez fue el primer Promotor quien, además de atender todas las necesidades, fomentó un ambiente de familiaridad entre los miembros de la comunidad escolar. En 1973 se amplían las secciones y se nombra como directora a la Sra. Bertha Michalick de Camino.

En 1975 se inaugura el primer pabellón de la sede actual, donde se trasladan todas las secciones de primaria. Años después, en 1978, se estrena el himno del colegio. La letra, según testimonio del P. Antonio Martínez, fue aporte de varios sacerdotes y laicos: principalmente del P. Esteban Peña, gran poeta y pintor de la Orden; el P. Ángel La Torre que adaptó la música de un himno muy antiguo; y la Srta. Carmen Flores que dirigió el coro.

Nuevos caminos

En 1979 el P. José Luis Domaica asume el cargo de promotor y la Srta. Haydée Mestanza la dirección del colegio. Se inaugura el pabellón de administración, el primer piso de secundaria y se comienza la formación de la biblioteca. En el año 1981 es nombrado promotor el padre Francisco Pérez Borobio, quien laborando silenciosamente ha permitido el crecimiento y renovación constante de nuestra institución haciendo posible que nuestros alumnos cuenten con todos los instrumentos que requiere y exige hoy la educación.

Nuestra infraestructura ha ido mejorando notoriamente. En el local de Sor Tita se ampliaron los patios de recreo, se construyó el segundo piso de secundaria y el pabellón de los laboratorios, compuesto de tres pisos. En esta área estudian los alumnos de los grados superiores de primaria y toda la secundaria. El antiguo local de Simón Salguero, también fue remodelado y ampliado. A pesar de las difíciles circunstancias, a principios del año 2002 se adquirió la casa contigua, lo que nos ha permitido atender mejor a los alumnos y a sus padres. Allí funciona el ciclo I de básica: tres secciones de inicial y los dos primeros grados de primaria. Ambos locales ofrecen infraestructura cómoda y acogedora: patios con juegos recreativos y deportivos; salas de música, psicomotricidad, proyección con equipos multimedia; modernos laboratorios de idiomas, cómputo, ciencias; biblioteca; aulas con televisores con circuito cerrado e intercomunicadores; todo muy bien implementado y con los requerimientos que la educación actual necesita. Es importante destacar la modernización que se ha efectuado en los equipos de las oficinas, agilizando la administración.

El deporte, el arte y el crecimiento en la fe

En el año 1979 el colegio participa en los campeonatos de ADECORE con poca fortuna, después de cuatro años se retira para reingresar, exitosamente, en 1988. Desde esa fecha se ha hecho merecedor de muchos trofeos y medallas en diferentes disciplinas deportivas compitiendo con colegios de mayor antigüedad y número de alumnos. Para lograr este buen nivel competitivo el colegio ha fomentado desde 1983 la formación de academias deportivas y anualmente organiza competencias interescolares: “Copa de natación Santa Rita”, el “Festival de ajedrez” y el “Campeonato de voley”.

Desde 1998 los alumnos del taller de periodismo publican regularmente el periódico “Sólo para alumnos”, que reemplazó a “El alumno Opina”, y antes a la “Gaceta Agustiniana”. Los padres de familia publicaron de 1978 a 1980 “Familia y Colegio”. En años sucesivos se han publicado boletines informativos para toda la comunidad. Desde 1995 el colegio publicó mensualmente “Toma y Lee” dirigido a los padres de familia y el anuario estudiantil, que a partir del 2004 se publicó con el nombre de “Madaura”, en recuerdo del lugar donde estudió San Agustín de adolescente. Actualmente nuestro colegio, a través de transmisiones en vivo y el acceso a la tecnología, mantiene reflexiones diarias para informar y cultivar en nuestros estudiantes los valores agustinianos que nos caracterizan como una gran familia. 

En 1993 se formaron diferentes talleres con los alumnos de secundaria, más tarde con los de primaria. Actualmente forma parte de la tradición anual del colegio “La Noche de Talentos” con la que se clausuran los talleres artísticos y de manualidades, donde el coro tiene un lugar importante. Asimismo, la presentación de una obra teatral que año a año va superándose es la demostración más evidente que también somos escuela que fomenta la cultura y el arte. 

Progresivamente, se ha ido intensificando la labor pastoral y misionera, fruto de la formación religiosa impartida, comprometiendo cada día, a más maestros, más alumnos y padres de familia. Tal vez, el logro más concreto se expresa en el trabajo de promoción humana que se realiza en Lima, en dos centros diferentes y en la Prelatura de Chota a través de las misiones.

Una de las primeras preocupaciones del P. Paco fue la preparación del personal de nuestra institución. En febrero de 1982 el personal directivo y parte del docente asiste, por primera vez,, a los cursos de capacitación organizados por el Consorcio de Colegios Católicos; este fue el punto de partida para la continua actualización pedagógica del personal así como la constante formación religiosa que permite contar con maestros sumamente profesionales, comprometidos con Cristo y con los ideales agustino-recoletos. Actualmente nuestro colegio sigue formándose a través de capacitaciones con convenios institucionales y la formación cristiana de nuestra Orden Agustino Recoleta.

Camino a la excelencia

El primer ideario del colegio se elabora en 1988, al año siguiente, el perfil básico del alumno y del maestro agustiniano. En 1991 se reestructura el ideario y en 1992 se publica el primer proyecto educativo. En 1997 toda la comunidad educativa se aboca a la reelaboración del Proyecto Educativo, el mismo que se empieza a aplicar en 1998. Inmediatamente después todos los profesores se dedican a la elaboración del Currículo del Colegio, partiendo del P.E.I y del Currículo del Ministerio de Educación. Insatisfechos con lo que somos -propio de un espíritu agustiniano- desde el 2003 estamos trabajando el Proyecto de Calidad según el modelo EFQM (European Foundation for Quality Management) que promueve la gestión de calidad total como camino hacia la excelencia. 

La pandemia: una historia de superación

En el año 2020 vivimos la pandemia y afrontamos los retos con organización y tecnología. El contexto de entonces nos exigió como institución adaptarnos a una nueva normalidad por la salud y formación de nuestros estudiantes. Por ello, empleamos la metodología E-learning desarrollando las clases a través de nuestro moderno Campus Virtual, donde se llevan a cabo todos los cursos en los niveles de Inicial, Primaria y Secundaria. Venciendo las dificultades que todo desarrollo lleva consigo, sabemos que nuestro colegio Santa Rita de Casia es merecedor del prestigio que hoy tiene dentro de la comunidad miraflorina y esto es motivo de justa satisfacción para los que estudian y laboran en él.

Con miras al futuro

El impacto de la globalización y de la tecnología están generando un mundo cada vez más interconectado, a un ritmo más acelerado, con posibilidades nunca antes imaginadas, pero que también plantea grandes desafíos en cuanto a ética, seguridad, privacidad y valores. Desarrollar competencias digitales entre nuestros estudiantes y en nuestro personal docente es inminente y necesario. Ser un colegio Google Reference School es una aspiración; por ello, nuestro personal está en capacitación permanente para lograr el desarrollo de competencias y habilidades digitales para hacer una inserción exitosa de la tecnología en el aula y la comunidad educativa.